10 / 07 / 2025 / Fuego y humos

Medidas de seguridad contra incendios en edificios de viviendas

En la arquitectura residencial, las medidas de seguridad contra incendios deben planificarse desde el inicio del proyecto, ya que afectan directamente a la configuración del edificio: desde la compartimentación entre unidades habitacionales y zonas comunes, hasta el diseño de los núcleos de evacuación, los pasos de instalaciones y la ventilación. Este tipo de construcciones presenta particularidades que incrementan el riesgo: alta densidad de ocupación, recorridos de evacuación compartidos y elementos susceptibles a la propagación del fuego, como patios interiores o fachadas ventiladas. 

Es por eso que en este artículo analizamos los criterios normativos y técnicos que rigen la seguridad contra incendios en edificios de viviendas, con especial atención a los elementos de sectorización y las ventajas de las cortinas cortafuegos y barreras de control de humos. También se revisan dos casos recientes de incendios —Grenfell y Campanar— para extraer lecciones aplicables a la arquitectura residencial contemporánea. 

Incendios en edificios residenciales: lecciones de Grenfell y Campanar

El análisis de incendios recientes en edificaciones residenciales proporciona información valiosa sobre cómo ciertos factores pueden influir en la propagación del fuego. Los casos de la Torre Grenfell en Londres y el edificio de Campanar en Valencia destacan la importancia de una planificación adecuada en materia de seguridad contra incendios, especialmente en lo que respecta a la selección de materiales.

La tragedia de Grenfell: un llamado a la acción en la seguridad de viviendas

El incendio de la Torre Grenfell, ocurrido el 14 de junio de 2017 en Londres, se originó por un fallo eléctrico en un frigorífico en un apartamento de la cuarta planta. El fuego se propagó rápidamente por la fachada del edificio, que había sido renovada en 2016 con paneles de aluminio compuesto con núcleo de polietileno, un material altamente combustible. Esta configuración facilitó un efecto chimenea entre el revestimiento y el aislamiento, permitiendo que las llamas ascendieran rápidamente por el exterior del edificio. La tragedia resultó en 72 fallecidos y puso de manifiesto la necesidad de revisar las normativas relacionadas con los materiales de revestimiento en edificaciones de gran altura.

El incendio de Campanar: ¿qué falló en la prevención de riesgos?

El 22 de febrero de 2024, un incendio devastó un complejo residencial en el barrio de Campanar, Valencia, causando la muerte de diez personas. El fuego se inició en un apartamento de la séptima planta y se propagó rápidamente por la fachada del edificio, que estaba revestida con paneles de aluminio compuesto. Las condiciones meteorológicas, incluyendo vientos fuertes, contribuyeron a la rápida expansión del incendio. Este suceso ha generado un debate sobre la idoneidad de ciertos materiales de revestimiento y la necesidad de medidas preventivas más estrictas en la construcción de edificios residenciales.​

¿Qué medidas de seguridad contra incendios son obligatorias en la construcción de viviendas?

Cumplir con las exigencias de seguridad contra incendios en el sector residencial no solo implica seleccionar productos certificados, sino integrarlos correctamente en el diseño arquitectónico y constructivo del edificio. El marco normativo vigente, el Documento Básico de Seguridad en caso de Incendio, CTE DB-SI, define una serie de condiciones técnicas que afectan directamente a la geometría, materiales y sistemas de sectorización, evacuación y control de humos.

Estas exigencias impactan en decisiones clave del proyecto: la posición de los elementos sectorizantes, la solución para los pasos de instalaciones, el tipo de puertas o barreras móviles, la ventilación de zonas comunes o la resistencia al fuego requerida en cada elemento constructivo. La correcta aplicación de estas medidas debe evaluarse no solo en planta, sino también en sección, considerando la continuidad vertical de la protección pasiva y la reacción de los sistemas ante diferentes escenarios de incendio.

Normativa actual sobre seguridad contra incendios en edificaciones residenciales

El CTE DB-SI es el documento que establece las condiciones que deben cumplir los elementos constructivos para limitar la propagación del fuego y permitir la evacuación segura. Entre las exigencias más relevantes en proyectos residenciales destacan:

  • Compartimentación en sectores de incendio: las viviendas deben estar separadas entre sí y de los elementos comunes (escaleras, vestíbulos, cuartos técnicos) mediante elementos con resistencia al fuego EI-60 como mínimo. En edificios con más de 28 m de altura de evacuación, esta exigencia se eleva a EI-90 o más.
  • Protección de núcleos de comunicación vertical: escaleras, ascensores y patinillos deben sectorizarse con elementos EI-120, garantizando la continuidad de la resistencia al fuego en todo el recorrido, incluyendo registros, puertas y pasos de instalaciones.
  • Zonas de riesgo especial: cuartos de contadores, trasteros o salas de residuos deben compartimentarse del resto del edificio, con resistencia variable según el riesgo (habitualmente EI-90 o EI-120), según el nivel de carga térmica y la accesibilidad del espacio.
  • Evacuación de humos: la UNE 23585 y la EN 12101 regulan los sistemas de control de temperatura y evacuación de humos (SCTEH), obligatorios en garajes y recomendables en vestíbulos cerrados, sobre todo cuando están alejados de las salidas principales.
  • Fachadas y reacción al fuego: si se emplean sistemas de fachada ventilada, el aislamiento y los acabados deben cumplir al menos una clasificación B-s3,d0, y disponerse de barreras cortafuegos horizontales y verticales para limitar la propagación interplanta. El CTE aún no obliga a ensayos BS 8414 o ASFP, pero cada vez más pliegos lo exigen como mejor práctica.

Todo elemento constructivo que actúe como sectorizador debe estar ensayado conforme a EN 1364-1 / EN 1634-1 y clasificado según EN 13501-2. Además, si se utilizan sistemas textiles (como cortinas cortafuegos), su instalación y dimensionado deben estar avalados por un Informe de Evaluación Técnica (ITE) y, si exceden las dimensiones ensayadas, cumplir con la EN 15269-11 para su extrapolación.

Instalación de sistemas contra incendios en edificios: ¿qué opciones existen?

La normativa actual permite resolver la compartimentación y protección contra incendios en edificios residenciales mediante distintos tipos de soluciones, cuya elección dependerá del diseño arquitectónico, las limitaciones del espacio y los requisitos de evacuación. Las más habituales son los sistemas constructivos tradicionales —tabiquería EI, puertas cortafuegos, registros sellados— que garantizan resistencia al fuego cuando se aplican correctamente, aunque pueden requerir mayor ocupación de espacio o interferir con la continuidad estética.

En aquellos casos donde se prioriza la versatilidad, la integración arquitectónica o la necesidad de mantener zonas abiertas sin elementos fijos, existen soluciones móviles o retráctiles, como las cortinas textiles. Estos sistemas permiten sectorizar sin alterar el diseño ni limitar el uso habitual del espacio, siendo cada vez más considerados en proyectos de rehabilitación o arquitectura contemporánea.

Cortinas cortafuegos: la solución más eficaz para la sectorización en edificios residenciales

En los últimos años, la arquitectura residencial ha evolucionado hacia configuraciones más abiertas y una integración cada vez más exigente entre funcionalidad, diseño y normativa. En este contexto, las cortinas cortafuegos se han consolidado como una solución eficaz y cada vez más presente en proyectos de viviendas, tanto en obra nueva como en rehabilitación.

Su capacidad para actuar como elemento sectorizador solo cuando es necesario —sin interferir en el uso cotidiano del edificio— las convierte en una herramienta clave dentro de la protección pasiva contra incendios. A continuación, exploramos sus ventajas técnicas en estos espacios:

Ventajas de las cortinas cortafuegos en proyectos de viviendas

En el ámbito de la edificación residencial, las cortinas cortafuegos representan una solución altamente eficaz para resolver los puntos críticos de compartimentación donde los sistemas constructivos tradicionales resultan inviables por razones de espacio, diseño o uso. Su principal ventaja es la flexibilidad de integración arquitectónica: permiten sectorizar sin introducir elementos físicos permanentes que condicionen la circulación o la configuración del espacio.

Como sistemas retráctiles, permanecen ocultos en falsos techos, dinteles o soluciones empotradas, desplegándose automáticamente solo en caso de activación del sistema de detección. Esto permite mantener diáfanos vestíbulos, escaleras abiertas, accesos a garajes o patios interiores, cumpliendo simultáneamente con las exigencias del DB-SI en materia de compartimentación.

Desde el punto de vista funcional, están equipadas con sistemas fail-safe por gravedad, alimentación autónoma (SAI), sensores de posición y compatibilidad con BMS y centrales de detección, garantizando un comportamiento fiable incluso en situaciones de fallo eléctrico.

Además, su instalación es limpia, rápida y sin necesidad de obra estructural, lo que las convierte en una opción especialmente ventajosa en proyectos de rehabilitación, cambios de uso o edificios en funcionamiento. Ensayadas para más de 1.000 ciclos de operación y con mantenimiento mínimo, ofrecen una solución duradera, técnica y estéticamente adaptada a las exigencias de la arquitectura residencial contemporánea.

La seguridad contra incendios en edificios de viviendas, por lo tanto, no puede abordarse como una simple respuesta normativa. Debe entenderse como una estrategia integral que condiciona desde el diseño arquitectónico hasta la selección de soluciones técnicas específicas, con impacto directo sobre la seguridad de los ocupantes, la durabilidad del edificio y la eficiencia operativa en caso de emergencia.

Si estás trabajando en un proyecto residencial y necesitas asesoración, nuestro equipo técnico está a tu disposición para desarrollar una propuesta a medida de tus necesidades.